(VIDEO / FOTOS) Municipal venció a Alianza y agudizó crisis deportiva de íntimos

En el rostro del entrenador chileno Mario Salas se reflejaba mucha bronca e impotencia. Era lógico y comprensible. Alianza Lima sumó una nueva derrota ante Deportivo Municipal y todo apunta que tiene las horas contadas en el club de la Victoria.

Con algunos cambios de jugadores y nuevo dibujo táctico en el terreno de juego, Alianza encaró este compromiso contra los ediles con la obligación de ganar o ganar. Y, a decir verdad, los venía encarando de la mejor manera porque no solo tenía la posesión del balón -algo que no llama la atención- sino que también se las ingeniaron para irse al entretiempo con la ventaja en el marcador.

Sí, a los 38 minutos de juego, Oslimg Mora casi con la rodilla terminó empujando un balón que no pudo conectar bien el chileno Rubio. Minutos antes Díaz había salvado de la línea de gol, tras un remate de Rubio.

Municipal esperó mucho en su campo y tuvo poca agresividad en ataque, sin embargo, en el segundo tiempo, los ediles adelantaron sus líneas e hicieron flecos en una defensa íntima.

Iniciando casi la segunda mitad el chileno Rubio desperdició una clara ocasión frente a Melián y eso, de alguna manera, condicionó a lo que vendría después.

Y es que Municipal, apelando a su entrega, empujó a Alianza contra las cuerdas y encontró la paridad por intermedio de Renzo Alfani cuando se jugaban los 63 minutos de juego.

Alianza despertó de su letargo y bien pudo ponerse nuevamente en ventaja en el marcador, pero Miguel Cornejo solo frente a Melián remató desviado.

Los íntimos no lo podían creer y menos aún cuando Yhirbis Córdova, a falta de seis minutos para el final, le 'rompió' el arco a Rivadeneyra, luego de malos rechazos seguidos de la defensa victoriana.

De ahí en más solo se vio desesperación de los íntimos por empatar, situación que nunca llegó para pesar de sus hinchas.

Alianza volvió a perder y ahora sí no solo se aleja de la posibilidad de quedar primero en su grupo sino que el fantasma del descenso comenzó a aparecer con fuerza. Quién lo diría.